Juzgado Supraprovincial Permanente de Huánuco sentenció a cadena perpetua contra Anderson Ramírez Ibarra (31), tras ser hallado culpable del delito contra la libertad sexual, en la modalidad de violación sexual, en agravio de una menor.
Según el expediente, los hechos ocurrieron en agosto del 2020, cuando la menor, de solo 12 años de edad, se encontraba sola en casa, esperando el inicio de sus clases virtuales, instantes cuando el sujeto la tomó de la mano. Asimismo, la menor narró que la llevó a su cuarto y abusó sexualmente de ella.
Según la denuncia, Ramírez, tras llevarla a su habitación, aseguró la puerta con cajas de cerveza, luego la arrojó a su cama, quitó sus prendas y la ultrajó, a pesar de las súplicas de la menor.
Después de consumar la violación, el hombre la amenazó de muerte si contaba lo que había ocurrido.
El 06 de septiembre, días después de pertetrarse el abuso sexual, la madre de la menor vio que el sujeto intentaba besar a la fuerza a su hija, fue cuando le llamó la atención y preguntó a la menor si le había hecho algo, sin embargo, ella únicamente atinó a llorar.
Posteriormente, la pequeña confesó a su padre y madre lo que había padecido a manos de Ramírez, así que fueron a denunciar al sujeto en la comisaría. Asimismo, horas después, gracias a un exitoso operativo, realizado el 22 de abril del año pasado, se logró detener al violador. Desde entonces se encuentra recluido en el penal de Huánuco.
Cabe precisar que el caso fue investigado por el fiscal Ronoel Garay Campos de la Primera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Huamalíes. En el juicio oral, los magistrados encontraron culpable a Anderson Ramírez y lo condenaron a morir en la cárcel.
Además, le impusieron el pago de 3000 soles por concepto de reparación civil a favor de la agraviada.
